El jurista Avelino Guillén analizó el caso en torno a la ex primera dama, Nadine Heredia, y su viaje a España tras ser designada directora de la Oficina de Enlace de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Ginebra.
Para Guillén, hubo un error de la Fiscalía en su estrategia, pues según considera, se debió plantear que Heredia Alarcón solicite una autorización para cualquier salida del país.
Asimismo, consideró que la posición de la Cancillería debe ser lo más enérgica posible, “no es posible que en nuestras narices un organismo interfiera con la marcha de un proceso por lavado de activos”, apuntó.
El también ex fiscal supremo refirió, además, que el Estado peruano, la Fiscalía y Poder Judicial, debe reaccionar, al considerar el hecho como “una burla al sistema judicial”.