Las autoridades del estado de Sao Paulo indicaron que el agresor, Sidnei Ramis de Araújo, habría estado molesto por la separación con su ex esposa, quien murió en el ataque, al igual que el hijo de ambos de nueve años.
La Policía no pudo confirmar las identidades ni las edades de las víctimas, 11 en total. La masacre dejó también varias personas heridas que se encuentran en estado grave.
Los vecinos indicaron que escucharon estallidos unos 15 minutos antes de medianoche en la vivienda donde se desarrollaba la fiesta, pero que no los reconocieron inmediatamente como disparos.
El asesino, de 40 años, que estaba en proceso legal de divorcio de su ex mujer y que no aceptaba la separación, al final se suicidó disparándose en la cabeza.