El papa Francisco visitó el Hospital Pediátrico Federico Gómez de México, en donde se encontró con decenas de niños que padecen de cáncer y otras enfermedades. El Sumo Pontífice repartió rosarios y bendijo a los pacientes y sus familiares reunidos en el nosocomio.
Acompañado por Angélica Rivera, esposa del presidente Enrique Peña Nieto, el pontífice realizó un recorrido por las diferentes áreas del nosocomio y saludó a los niños personalmente se tomó fotos con ellos y repartió bendiciones.
En su discurso en el hospital, el papa Francisco destacó la importancia de lo que llamó “cariñoterapia”, que ayuda a que la vida de los pequeños tenga “más alegría”. “A veces una caricia ayuda tanto a recuperarse”, sostuvo el pontífice.