Una operación conjunta de la policía proveniente de diferentes provincias de la región de Piura se llevó a cabo en la Parcela J con el objetivo de desalojar a ocupantes ilegales que habían instalado esteras, plásticos y sacos para lotizar el área, que el municipio de Piura pretende subastar.
La intervención, que inicialmente se realizó de manera pacífica, contó con el uso de drones y maquinaria pesada para asegurar el éxito del desalojo.
Sin embargo, la situación se tornó violenta cuando los invasores se resistieron a abandonar el lugar, lo que llevó a enfrentamientos con la policía.
Según información proporcionada por las autoridades policiales, decenas de personas opusieron resistencia al desalojo y fueron detenidas, siendo trasladadas a la comisaría más cercana para enfrentar cargos por su participación en la ocupación ilegal.