La situación en Mesa Redonda, en el centro de Lima, sigue siendo crítica por la alta informalidad, afectando la campaña navideña de los comerciantes formales. A pesar de su promesa de regular el comercio ambulatorio, el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, ha emitido declaraciones contradictorias sobre el tema.
Por un lado, afirmó que los ambulantes tienen derecho a trabajar para mantener a sus familias, pero días antes ordenó el cierre de varios accesos al lugar, incluso anunció la instalación de rejas permanentes para evitar el ingreso de ambulantes a mesa redonda.
Este viernes 6 de diciembre, a días de celebrar Nochebuena, Mesa Redonda lucía abarrotada de clientes y sobre todo ambulantes ofreciendo productos como árboles, adornos navideños y comida, generando una enorme aglomeración en las calles.
Comerciantes formales advirtieron sobre el riesgo de una tragedia en caso de emergencias como incendios o sismos, debido a la falta de orden y la dificultad para desplazarse en la zona.
INSEGURIDAD EN MESA REDONDA
A la problemática de la informalidad se suma la inseguridad ciudadana. El centro de Lima, especialmente en estas fechas, es uno de los puntos más vulnerables ante robos y asaltos, lo que preocupa tanto a compradores como a comerciantes.
Otro factor alarmante es la presencia de mafias dedicadas al cobro de cupos en Mesa Redonda. Estas organizaciones criminales extorsionan tanto a ambulantes como a comerciantes formales, exigiendo dinero bajo amenazas de atentar contra sus vidas y las de sus familias.
