La situación sobre el control de incendios en la capital se está viendo afectado debido a que los hidrantes disponibles para el abastecimiento de agua necesaria para el equipo de bomberos, estan siendo afectados por el robo de piezas, las cuales son vendidas por delincuentes en el mercado negro.
En toda el área de Lima Metropolitana y Callao, se estima que hay aproximadamente 20 mil hidrantes. Germán Ramos, gerente de servicios del centro de Sedapal, señaló que el robo de estas piezas por parte de delincuentes es un problema recurrente.
“Los delincuentes las sustraen para venderlas por su peso en el mercado negro. Desde nuestra institución, nos comprometemos a proteger estos hidrantes mediante mantenimientos periódicos cada seis meses, para garantizar su correcto funcionamiento en todo Lima y Callao”, explicó Ramos.
ROBO DE AGUA
Ramos enfatizó que estos hidrantes son frecuentemente vandalizados por individuos sin escrúpulos con el fin de robar agua, aprovechando su ubicación en la vía pública, lo cual complica la vigilancia constante para prevenir estos actos.
“Solicitamos a la ciudadanía que reporte cualquier incidente sospechoso, especialmente si observan a alguien manipulando un hidrante sin llevar el uniforme de Sedapal”, recalcó.