Este último domingo, los exteriores de la discoteca Xanders ubicada en San Juan de Lurigancho se tiñeron de sangre, luego que dos delincuentes abordo de una moto lineal desataron un tiroteo contra presuntas meretrices.
Dos de los proyectiles alcanzaron a una vendedora ambulante que se encontraba trabajando por la zona y que, posteriormente, fue trasladada de emergencia al hospital de Canto Grande.
QUEJAS DE VECINOS
Los vecinos y comerciantes del lugar denuncian que la mencionada discoteca continúa funcionando, pese a haber sido clausurada y estar rodeada de muros de concreto que impiden el acceso a ella.
La Policía está investigando el hecho para dar con el paradero de los autores de crimen, que podrían tratarse de presuntos proxenetas que cobran cupos.