La imagen del pequeño Osram de cinco años viene dando la vuelta al mundo: Un niño en estado de shock sentado en una ambulancia sin saber qué hacer, tras un bombardeo en la ciudad de Alepo en Siria.
Esta fotografía no solo debe causar compasión, sino es un llamado de atención para hacer un alto a estos actos que desangran al país sirio, donde diariamente se rescatan de los escombros a niños y adultos afectados por el conflicto armado.
Diversos medios han usado las fotos para denunciar las atrocidades de la guerra. Sin embargo, en un tiempo más, estas imágenes solo quedarán en el olvido ya que muchos países solo denuncian pero no hacen nada por revertir la situación.
Las Naciones Unidas han pedido un alto el fuego y están presionando para la reanudación de las conversaciones de paz, que no han logrado poner fin al conflicto que comenzó en el año 2011 y hasta el momento ha dejado más de 250 mil muertos.
