Una falsa alarma de disparos provocó escenas de pánico, evacuaciones masivas e importantes retrasos en los vuelos la noche del domingo, en dos terminales del aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York, en Estados Unidos.
La policía se desplegó por toda el área y obligó a los pasajeros a tirarse al suelo como medida de seguridad. Por otro lado, las autoridades revisaron las instalaciones, pero no encontraron ningún objeto sospechoso.
Sin embargo, se sabe que cuando empezó la alerta, todos los monitores trasmitían la carrera de Usain Bolt en los Juegos Olímpicos Río 2016, por lo que se presume que el disparo de inicio fue confundido por los pasajeros.