Un gigantesco incendio consumió por completo una histórica iglesia presbiteriana ubicada en el estado de Nueva Jersey, Estados Unidos. Los equipos de bomberos trabajaron por varias horas para controlar las llamas, que amenazaron con expandirse hacia las edificaciones aledañas.
Afortunadamente, la iglesia se encontraba vacía al momento del siniestro. El templo contaba con más de 150 años de antigüedad y era una de las primeras iglesias presbiterianas que se edificaron en Nueva Jersey.
