Un nuevo caso de presunta discriminación llegó hasta los sets de “Dilo Fuerte”. Elizabeth D’uniam y su esposo, acusan a la academia de Ballet Avilés de discriminar a su menor hija con habilidades diferentes.
Según la madre, la escuela de baile quiso que la menor tomara clases personalizadas durante un periodo de 2 meses, en donde tendría que pagar 4 veces más que lo que cuestan las clases regulares. Algo que Elizabeth y su pareja no aceptaron.
Ante la negativa de los padres, Elizabeth mencionó que la directora de la academia, Pamela Bouanchi, condicionó a la menor a que tome sus clases acompañada de un shadow, es decir, alguien que asista y ayude a la pequeña durante las sesiones de ballet, algo que tampoco agradó a los padres, pues aseguran que su hija es independiente y goza de autonomía pese a su condición.
Además de esto, Elizabeth acusa a la academia fundada por Lucy Avilés, de negarse a entregarles el libro de reclamaciones, e incluso, de presuntamente maltratar a la menor durante las clases de baile, entre muchas otras acusaciones.
Academia lo desmiente
Por su parte, la fundadora Lucy Avilés, en compañía de la directora Pamela Bouanchi, rechazaron dichas acusaciones, alegando que nunca antes han estado involucradas en este tipo de incidentes. Asimismo, manifestaron que las clases personalizadas fueron una recomendación debido a que la menor se distraía constantemente, pues su único fin era jugar.
También, especificaron que dichas clases particulares solo serían 2 o 3, y no durante 2 meses como señaló la madre, además, denunciaron que tanto Elizabeth como su pareja llegaron a la academia gritando e insultando al personal, causando el miedo de las otras menores.